martes, 19 de enero de 2010

BIENVENIDOS A NUESTRO BLOG



Este blog está dirigido a todas las personas con diabetes que deseen saber más acerca de su enfermedad, como también al personal sanitario que quiera profundizar más acerca de ésta patología y sobre todo para alumnos que como nosotros tienen la necesidad de conocer más información sobre la diabetes.

¿QUIENES SOMOS?:
María, Desirée, Carmen, Arantxa y Anabel. Somos un grupo de estudiantes de 3º de enfermería de la universidad de Huelva y hemos creado éste blog porque la diabetes nos parece un tema muy interesante de tratar, ya que, creemos que lo sabemos todo sobre ésta enfermedad y en realidad se nos escapan muchas cosas.

Con este espacio pretendemos conseguir que las personas con diabetes conozcan todos los autocuidados que deben realizar para llevar una vida normal y sepan que el hecho de tener diabetes no les incapacita para realizar ningún tipo de actividad como por ejemplo practicar deporte y otras muchas más cosas.

jueves, 14 de enero de 2010

Anatomía y Fisiología del Páncreas

Recuerdo anatomo-fisiológico del metabolismo del páncreas


El páncreas es un
órgano impar, tiene forma alargada (12-15 cm de largo) y cónica puede pesar hasta 100 gramos. Localizado transversalmente en la parte dorsal del abdomen, ocupa una posición profunda. Ubicado en el sistema digestivo y endocrino de los vertebrados, por detrás del estomago. Es, a la vez, una glándula endocrina (produce ciertas hormonas importantes, incluyendo insulina, glucagón y somatostatina), como también una glándula exocrina (segrega jugo pancreático que contiene enzimas digestivas que pasan al intestino delgado). Estas enzimas ayudan en la ruptura de carbohidratos, lípidos, proteínas y ácidos nucléicos en el quimo.






Partes del páncreas.
El páncreas se divide en varias partes:
Cabeza: se encuentra situada en el lado derecho del órgano, es la parte más ancha y se encuentra dentro de la curvatura duodenal (primera parte del duodeno).
· Cuello: Anterior a los
vasos mesentéricos superiores. Posterior a él se crea la vena porta. A la derecha de la cabeza.
Cuerpo: es la parte cónica izquierda, continúa posterior al estómago hacia la derecha y se extiende ligeramente hacia arriba.
Cola: es el final del páncreas y termina cerca del bazo. Es la única parte del páncreas intraperitoneal.
Conducto pancreático: llamado también Conducto de Wirsung. Empieza en la cola dirigiéndose a la derecha por el cuerpo. En la cabeza cambia de dirección a inferior. En la porción inferior de la cabeza se une al conducto colédoco acabando en la
ampolla hepatopancreática o de Vater que se introduce en el duodeno descendente (segunda parte del Duodeno).
Conducto pancreático accesorio (llamado también Conducto de Santorini), El canal común que lleva la bilis y las secreciones pancreáticas al duodeno está revestido por un complejo circular de fibras de músculo liso que se condensan en el esfíter de Oddi a medida que atraviesan la pared del duodeno.



Función del Páncreas.
El páncreas tiene dos funciones, una endocrina y otra exocrina:
· La función endocrina es la encargada de producir y segregar la
insulina y el glucagón (estas hormonas regulan el nivel de glucosa en la sangre) a partir de unas estructuras llamadas islotes de Langerhans. En ellas, las células alfa producen glucagón, es una hormona que tiene el efecto exactamente contrario al de la insulina, es hiperglucemiante (eleva el nivel de glucosa en la sangre); las células beta producen insulina, es una hormona que regula la cantidad de azúcar en la sangre (disminuye los niveles de glucosa sanguínea). Su misión es facilitar que la glucosa que circula en la sangre penetre en las células y sea aprovechada como energía. La glucosa se puede considerar como la "gasolina" que hace funcionar al "motor" de nuestro cuerpo. Las células betas "miden" los niveles de azúcar constantemente y entregan la cantidad exacta de insulina para que la glucosa pueda entrar a las células, manteniendo así el azúcar en el rango normal de 70 a 110 mg. El exceso de glucosa es guardado como tejido graso, o en el hígado como glucógeno. Entre comidas, cuando su azúcar en sangre está bajo y las células necesitan combustible, el glucógeno del hígado es convertido en glucosa; y las células delta producen somatostatina(que previene la liberación de las otras dos hormonas).



· La función exocrina consiste en la producción del
Jugo pancreático que se vuelca a la segunda porción del duodeno a través de dos conductos excretores: uno principal llamado Conducto de Varg y otro accesorio llamado Conducto de Maihem (se desprende del principal). Además regula el metabolismo de la grasas. El jugo pancreático está formado por agua, bicarbonato, y numerosas enzimas digestivas, como la Tripsina y Quimotripsina (digieren proteínas), Amilasa (digiere polisacáridos), Lipasa (digiere triglicéridos o lípidos), Ribonucleasa (digiere ARN) y Desoxirribonucleica (digiere ADN). Las enzimas secretadas por el tejido exocrino del páncreas ayudan a la degradación de carbohidratos, grasas, proteínas y ácidos en el duodeno. Estas enzimas son transportadas por el conducto pancreático hacia el conducto biliar en forma inactiva. Cuando entran en el duodeno, se vuelven activas. El tejido exocrino también secreta un bicarbonato para neutralizar el ácido del estómago en el duodeno.

Tipos de Diabetes Mellitus

El metabolismo es la forma mediante la cual nuestros organismos utilizan los alimentos digeridos para el crecimiento y la obtención de energía. La mayoría de los alimentos consumidos son convertidos en glucosa, la cual es usada como combustible para nuestro organismo, es decir, la glucosa sirve para producir energía. Después de la digestión, la glucosa entra al corriente sanguíneo, lugar en el que se encuentra disponible para ser procesada por las células del cuerpo para el crecimiento y la energía.


El páncreas es un órgano que se sitúa cerca del estómago, y produce una hormona llamada insulina que permite que la glucosa sea transportada al interior de todas las células. La diabetes mellitus es una enfermedad crónica que consiste en un trastorno del metabolismo, el cual se identifica como la presencia elevada de glucosa en sangre, que puede ser debido a que el organismo no produce insulina o la utiliza de manera inadecuada (resistencia insulínica).


A consecuencia de esta alteración, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo, inunda la orina y sale del organismo en lugar de ser utilizada por las células para producir energía. De esta manera, nuestro cuerpo pierde su principal fuente de energía, aunque la sangre contenga gran cantidad de glucosa.


Las concentraciones de azúcar en sangre varían a lo largo del día. Después de cada comida, las cifras se ven aumentadas, valores que se vuelven a recuperar al cabo de 2 horas. Los valores normales de glucosa se sitúan entre 70 y 110 mg/dl de sangre por la mañana después de una noche de ayuno. Suele darse valores de 110 a 140 mg/dl después de la ingestión de alimentos o líquidos que contengan azúcar u otros hidratos de carbono. Pasadas dos horas después de comer, estas cifras descienden y se sitúan entre 80 y 120 mg/dl. Los valores normales tienden a aumentar ligeramente y de modo progresivo después de los 50 años de edad, sobre todo en las personas que llevan una vida sedentaria.






Diabetes mellitus tipo I: esta alteración tiene lugar cuando las células betas presentes en el páncreas son destruidas y no pueden segregar la hormona insulina, por lo que la glucosa no puede ser procesada por nuestro organismo. Este tipo de diabetes se trata de una enfermedad autoinmune, ya que el propio organismo de la persona produce anticuerpos que atacan y destruyen a las células beta. La diabetes tipo I aparece de una forma brusca y en la infancia, por lo que se conoce como diabetes juvenil o insulinodependiente, ya que estos pacientes necesitan tratarse con un tratamiento sustitutorio hormonal durante toda la vida.
Esta patología puede surgir debido a una combinación de factores genéticos y ambientales, no se puede decir la causa concreta que da lugar al comienzo de la enfermedad. La herencia tiene un gran peso junto con factores ambientales, uno de los cuales puede ser la presencia de un virus que ayude a que se desarrolle la diabetes.




Diabetes mellitus tipo II: también se conoce como diabetes no insulinodependiente y se produce por una dificultad en la acción de la insulina debido a la falta de sensibilidad de los tejidos hacia la insulina (insulinorresistencia), o por una secreción insuficiente de la hormona por las células beta. Al aumentar la concentración de glucosa en sangre, también se suele producir la elevación de otros valores, tales como: triglicéridos y colesterol.
Se puede decir que las causas de este tipo de diabetes son parecidas a las que influyen en la insulinodependiente, pero cambia el porcentaje de peso que tienen los factores. Es decir, aquí la herencia tiene importancia, pero sobre todo influyen los factores ambientales, que son factores de riesgo modificables, es decir, que si actuamos sobre ellos se puede prevenir la enfermedad. El sedentarismo, la mala alimentación, el tabaco y la obesidad tienen una gran influencia en la aparición de la diabetes.


Incidencia, prevalencia, causas y factores de riesgo

La incidencia, prevalencia, etiología y factores de riesgo de la diabetes mellitus

En Medicina, para describir en cifras la importancia de una enfermedad, en este caso la Diabetes, se utilizan básicamente los términos epidemiológicos incidencia y prevalencia.
- La prevalencia es la proporción de personas que, en una población determinada y un tiempo concreto, están afectados por la enfermedad.
- La incidencia es la proporción de personas, previamente sanas para esta patología, que desarrollan la enfermedad en una población determinada y durante un periodo de tiempo, generalmente un año.

Los estudios realizados sobre la población española nos revelan algunas situaciones muy importantes:


Se han recogido datos de personas diabéticas conocidas y de otras que han sido diagnosticadas a raíz del estudio. La relación entre Diabetes conocida y desconocida es de 1/1 y 2,2/1 dependiendo de los grupos de edad. Esto significa que la mitad de las personas que padecen diabetes lo desconocen.


La diabetes Tipo 2 es más frecuente en edades avanzadas, cuando existen antecedentes familiares con diabetes y en personas con obesidad. Por encima de los 70 años la prevalencia es de hasta el 25% de la población, mientras que la prevalencia media total en España está entre el 5.6% y el 10% (la prevalencia media total incluye las diferencias entre sexos y grupos de edad). Se ha observado también que la incidencia, especialmente en niños (de 0 a 15 años), es muy similar en las diferentes zonas estudiadas. El mantenimiento del registro de diabetes Tipo 1 ha permitido detectar un aumento progresivo de la incidencia en los últimos años.
de 0 a 15 años = 11,3 individuos cada 100.000 habitantes de 15 a 29 años = 9,9 individuos cada 100.000 habitantes.

El siguiente cuadro, obtenido de estudios realizados en León, Lejona (Vizcaya), Aragón, Cataluña y Asturias, muestra la prevalencia de las complicaciones crónicas producidas por la diabetes:


Según el Dr. Alberto Goday Arno, investigador que nos facilitó los datos, existe un cierto grado de inexactitud en estas cifras ya que se asumen como válidas en todo el territorio español, pero no tienen en cuenta las variaciones temporales, el envejecimiento de la población, la heterogeneidad territorial, etc. En cualquier caso, son una muestra de la importancia de la diabetes en España.
Los estudios científicos actuales, permiten predecir el escenario de la diabetes en el próximo siglo.



No obstante, estas cifras previstas pueden variar favorablemente, y mucho, gracias a la puesta en marcha de programas de prevención, ya sea de la diabetes, como de las complicaciones secundarias.

ETIOLOGÍA DE LA DIABETES

*Diabetes Tipo 1
La etiología se relaciona con un efecto o insuficiencia de las células Beta, (no son conocidos los fenómenos que desencadenan la destrucción de estas células). Su destrucción progresiva da lugar a una pérdida de la respuesta de la insulina a la glucosa y con el paso del tiempo hiperglucemia detectada clínicamente.
Algunas formas de diabetes tipo 1 no tienen causa conocida y se clasifican como diabetes “idiopática”.

*Diabetes Tipo 2
La etiología se debe a un defecto en la excreción y en la acción de la insulina. La mayoría de los individuos tienen un defecto hereditario en la acción de la insulina como consecuencia de las anomalías en la vía sintética del glucógeno o en el transporte de la glucosa. También contribuyen factores adquiridos como: la obesidad, estilo de vida sedentaria, envejecimiento, ciertos fármacos, etc. Aproximadamente el 50% de los varones y el 70% de las mujeres con diabetes de tipo 2 son obesas.


FACTORES DE RIESGO
· Edad superior a 45 años
· Diabetes durante un embarazo previo
· Peso corporal excesivo (especialmente alrededor de la cintura)
· Antecedentes familiares de diabetes
· Dar a luz un bebé que pese más de 4 kg (9 libras)
· Colesterol HDL de menos de 35
· Niveles altos de triglicéridos, un tipo de molécula de grasa, en la sangre (250 mg/dL o más)
· Hipertensión arterial (superior o igual a 140/90 mmHg)
· Trastorno en la tolerancia a la glucosa
· Bajo nivel de actividad
· Dieta deficiente
· Consumo de verduras y frutas
· Consumo de medicamentos para el control de la hipertensión arterial
· Índice de masa corporal
Las personas de ciertos grupos étnicos, como los afroamericanos, los hispanoamericanos y los nativos norteamericanos, tienen todos altas tasas de diabetes
Toda persona mayor de 45 años debe hacerse revisar el nivel de glucosa en la sangre al menos cada tres años. Los chequeos regulares de los niveles de glucosa sanguínea en forma aleatoria deben comenzar a una edad más temprana y realizarse más a menudo si la persona está en mayor riesgo de padecer diabetes.

La edad y la diabetes
El riesgo de diabetes tipo 2 aumenta con la edad y es más común en personas de más de 40 años.

La historia personal
Las personas que han tenido problemas con el azúcar en la sangre en el pasado pueden estar en mayor riesgo de desarrollar diabetes. Las mujeres que tienen diabetes durante su embarazo (llamado diabetes gestacional) también tienen mayor riesgo de desarrollar diabetes durante su vida.


La historia familiar y la diabetes
Una persona que tienen familiares cercanos con diabetes tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. Este aumento del riesgo se debe a la combinación de herencia genética y estilos de vida compartidos.

La raza, el grupo étnico y la diabetes
La diabetes tipo 2 es más común entre los Afro Americanos, los Latinos, los Americanos Nativos, los asiáticos y las personas de las Islas del Pacífico que entre los caucásicos.
La mayoría de los factores de la diabetes pueden ser modificados para reducir su riesgo, tanto a través de cambios de estilo de vida como a través de medicación, de ser necesario.Estos incluyen: el peso, el tamaño de la cintura.

El riesgo de la diabetes tipo 2 aumenta cuando el peso del cuerpo aumenta. Esto es especialmente cierto para muchas personas que llevan mucha grasa acumulada alrededor de la cintura (lo que se llama forma de manzana). El peso extra afecta la sensibilidad del cuerpo a la insulina y lo sobre recarga, aumentando el riesgo de enfermedades del corazón, de derrame cerebral, de alta presión y de alto colesterol. Mantener un peso saludable ha probado reducir el riesgo de cáncer de colon, riñones, seno y útero.

El uso de tabaco y la diabetes
Fumar aumenta su riesgo de diabetes. Fumar aumenta los niveles de sangre del cuerpo y disminuye la capacidad del cuerpo de utilizar insulina. Puede también cambiar la forma como el cuerpo acumula el exceso de grasa, aumentando la grasa alrededor de la cintura, la cual está relacionada con la diabetes. El daño que los químicos del tabaco hacen a los vasos sanguíneos, los músculos y los órganos también aumenta el riesgo de diabetes.La exposición al tabaco también aumenta su riesgo de enfermedades del corazón, de derrames cerebrales, de enfermedades vasculares periféricas, enfisema, bronquitis, osteoporosis, y de cáncer de pulmón, vejiga, riñones, páncreas, cuello uterino, labio, boca, lengua, laringe, garganta y esófago. Para muchas personas, dejar de fumar es lo mejor que pueden hacer para mejorar su salud.

La actividad física y la diabetes
El ejercicio es una de las mejores maneras de mantener un peso saludable, un factor clave para reducir el riesgo de diabetes. El ejercicio también ayuda a las células a usar la insulina de manera eficiente, lo que facilita el control de la azúcar en la sangre. Además, el ejercicio ayuda a prevenir otras enfermedades como las enfermedades del corazón, el derrame cerebral, la osteoporosis, y el cáncer de colon. Con sólo 30 minutos de actividad moderada diaria (como caminar) se puede disminuir su riesgo de enfermedades.

La dieta y la diabetes
La dieta es una herramienta poderosa para bajar el riesgo de diabetes. ¿Cuál es la mejor forma de hacerlo? Coma una dieta que se base en granos integrales, cereales con fibra y aceites vegetales líquidos, y limite los carbohidratos refinados (como las papas o el pan blanco).


El alcohol y la diabetes
El uso moderado de alcohol (una bebida al día para las mujeres y dos para los hombres) ha comprobado disminuir el riesgo de diabetes. El uso limitado de alcohol disminuye el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas. Sin embargo, las personas que no beben no deben comenzar. El alcohol posee riegos propios como el aumentar la presión, el peso corporal, las fallas del corazón, la adicción, el suicidio y los accidentes. Las personas que limitan su uso de alcohol tienen menos riesgo de cáncer de colon, y de seno.
Índice de Masa Corporal
La medida más utilizada para evaluar el grado de obesidad es el Índice de Masa Corporal (IMC). Este índice se obtiene a partir de una fórmula matemática y es un valor que determina, en base al peso y estatura de una persona, si ésta se encuentra en su peso normal o no y cuál sería su rango de peso más saludable.
El IMC se calcula dividiendo el peso en kilogramos por el cuadrado de la estatura en metros: IMC = Peso (Kg) / Altura (m)2
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que los individuos con un IMC de entre 25 y 29,9 sufren sobrepeso, mientras que quienes tienen un IMC de 30 o más son obesos.
El riesgo de desarrollar diabetes aumenta progresivamente tanto en hombres como en mujeres con la cantidad de exceso de peso.
El objetivo es alcanzar y mantener el normopeso, el peso normal que debe tener una persona según su edad, sexo y talla.

Consumo de verduras y frutas
La dieta Mediterránea, más promocionada en las últimas décadas por sus beneficios demostrados en la prevención y el tratamiento de la enfermedad cardiovascular, es el mejor modelo de dieta equilibrada. Entre las premisas exigidas por esta dieta está el consumo frecuente de frutas y verduras.
El concepto de la dieta Atlántica, otro paradigma de dieta ideal por ser concebida como dieta saludable, establece asimismo un consumo diario elevado de fruta y verdura.
Las frutas aportan energía, vitaminas, minerales y fibra. Las hortalizas: vitaminas, minerales, fibra, y contienen muy pocas calorías.
Se recomienda tomar 2 veces al día verduras y ensaladas y 2 ó 3 piezas de fruta también diarias. Esto reducirá su riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

Consumo de medicamentos para el control de la hipertensión arterial
La hipertensión, junto con el exceso de grasas, la obesidad y la diabetes componen el llamado síndrome metabólico, cuyo denominador común es la resistencia a la insulina. Es importante mejorar todos los componentes del síndrome, ya que cada uno de ellos potencia el riesgo de complicaciones de los otros elementos. Algunos de los fármacos que se utilizan para tratar la hipertensión pueden mejorar la sensibilidad a la insulina.

Signos y Síntomas

Signos y síntomas

Muchas veces la enfermedad no es sospechada hasta que un examen de glucemia -a veces solicitado como parte del chequeo general-pone de manifiesto niveles anormales de azúcar.
Los síntomas más frecuentes son cansancio, pérdida de peso, sed, infecciones genitales o bucales, variación de la agudeza visual y mareos.

· Aumento de la sed en cuanto a veces y volumen de líquido preciso.
· Aumento de la frecuencia y volumen de orina.
· Pérdida de peso a pesar del aumento del apetito.
· Vaginitis, infecciones de la piel, visión borrosa y frecuentes infecciones de vejiga.
· Ocasionalmente impotencia en el hombre y desaparición de la menstruación en la mujer.


Diabetes tipo I: La aparición de diabetes tipo 1 a menudo es repentina y dramática y puede incluir síntomas en relación a los niveles elevados de azúcar en sangre, tales como:

POLIURIA: Para que la glucosa pueda eliminarse por la orina es necesario que se disuelva en cantidades importantes en agua. Por esta razón cuando las personas con diabetes tienen elevados niveles de azúcar en sangre, orinan muchas veces y en grandes cantidades. A este efecto se le llama POLIURIA.

POLIDIPSIA: La pérdida de agua a través de la orina estimula al cerebro para enviar un mensaje de "sed". La persona con diabetes tiene mucha sed, incluso por las noches. A este síntoma se le conoce como POLIDPSIA.

POLIFAGIA: Al no poder ser metabolizada la glucosa, las células reclaman "energía" y el cuerpo trata de compensarlo aumentando la cantidad de alimento ingerido. A este incremento en el apetito se le conoce como POLIFAGIA.
ADELGAZAMIENTO Y CANSANCIO: Aunque la persona con diabetes coma más, las células no tienen energía suficiente, originándose la movilización de energías de reserva y por ello se produce el adelgazamiento debido a la alta combustión de grasas.
Además de estos síntomas en la analítica realizada podemos encontrarnos hiperglucemia, y a veces glucosuria y cetonuria.

HIPERGLUCEMIA: Con el término glucemia nos referimos a la glucosa circulante en sangre. Y utilizamos la palabra hiperglucemia cuando queremos decir que los niveles de azúcar están aumentados en la sangre.

GLUCOSURIA: Cuando la glucosa se eleva en la sangre por encima de un determinado nivel, esta aparece en la orina. Dicha presencia se denomina GLUCOSURIA.

CETONURIA: Al no disponer las células de "energía" suficiente proporcionada por la glucosa, tiene que recurrir a la energía que obtiene con la combustión de las grasas. El desecho de esta energía son los cuerpos cetónicos que se eliminan por la orina. A esto se le llama CETONURIA.
Las personas con diabetes experimentan distintos síntomas, según el grado de hiperglucemia que presenten. Cuando el azúcar esta controlada (niveles normales de glucemia o normoglucemia) la persona estará sin síntomas. En caso de hiperglucemia leve puede no notar síntomas, situación frecuente en el comienzo de la diabetes tipo 2, que puede así pasar desapercibida durante años antes de ser diagnosticada.

Otros síntomas que pueden describir las personas con diabetes:

A veces, pueden ocurrir INFECCIONES DE LA PIEL porque el exceso de azúcar en la sangre suprime las defensas naturales del organismo como ser la función de los glóbulos blancos. Además, el azúcar proporciona un excelente alimento para que crezcan las bacterias.
Los CALAMBRES EN LAS PIERNAS durante la noche, y la sensación de pies dormidos u hormigueo pueden ser el resultado de daño a los nervios producido por los altos niveles de glucosa en manera prolongada, que así causan cambios en los nervios.



Diabetes tipo II: se desarrolla más lentamente, por lo que los pacientes pueden estar asintomáticos por muchos años. De hecho cuando se hace el diagnóstico una de Diabetes tipo 2, esa persona ha sido portadora de la enfermedad desde hace aproximadamente 5 a 8 años antes de su diagnóstico. úlceras en los pies, pérdida de la sensibilidad, trastornos digestivos, disminución de la visión, daño renal, enfermedad coronaria, entre otras.

Las manifestaciones clínicas suelen ser inespecíficas: fatiga, retraso en la curación de heridas, cambios en la visión,etc. En algunos individuos con diabetes tipo II también pueden aparecer signos característicos de la diabetes tipo I.

Con frecuencia el individuo con diabetes tipo II no se da cuenta de los síntomas característicos hasta que aparecen las complicaciones propias de los mismos: úlceras en los pies, pérdida de la sensibilidad, trastornos digestivos, disminución de la visión, daño renal, enfermedad coronaria, entre otras.Otras manifestaciones son: glucosuria, vulvovaginitis con prurito, cetonuria, hemoglobina glicosilada, hipertensión e insuficiencia renal, evidencias de patología periférica de las extremidades inferiores, impotencia en el varón, neuropatía (principalmente en manos, pies, piernas y cabeza), falta de sensibilidad al frío y al calor, sensación de hormigueo y adormecimiento de los miembros, embarazos complicados, trastornos cardiovasculares.

Pruebas Diagnósticas

Diabetes tipo I:

Los siguientes exámenes se pueden utilizar para diagnosticar la diabetes:

·Análisis de orina muestra: la glucosa y los cuerpos cetónicos en la orina. La glucosa urinaria refleja, en ausencia de daño renal, la superación del umbral renal, concentración sanguínea de glucosa por encima de la cual aparecería en orina. Este límite se sitúa entre 160 y 180 ml/dL (9-10 mmol/L) de glucosa en plasma. Como prueba diagnóstica tiene un valor muy limitado por el cambiante grado de dilución que puede presentar. Sin embargo, su análisis tiene interés dentro de las pruebas urinarias de carácter rutinario para la detección de alteraciones.



·Examen de sangre para el diagnóstico: la glucosa en sangre en ayunas deber ser de 110 mg/dl o más en dos ocasiones. No se debe comer ni beber nada de 8 a 12 horas antes del examen. Se saca una muesta de sangre y se examina el nivel de glucosa. Si existe un nivel alto tiene diabetes potencial. La prueba de tolerancia a la glucosa en ayunas es la forma mas simple y rápida de medir la glucosa en la sangre y diagnosticar la diabetes. En ayunas significa que la persona no ha comido ni bebido nada (excepto agua) durante l2 horas antes del examen. El diagnostico se hace en una persona si su nivel de glucosa en sangre es de 126 mg/dl o superior en dos pruebas separadas.



·La glucosa aleatoria (sin ayunar) en la sangre excede los 140 mg/dl y el paciente tiene síntomas como aumento de la sed, de la micción y fatiga (esto se debe confirmar con examen en ayunas).

·El examen de insulina (nivel bajo o indetectable de insulina): tanto en la extracción basal como tras la sobrecarga puede ser interesante conocer los cambios en lainsulina plasmática. Puede emplearse el péptido C (fragmento inactivo liberado por el páncreas en proporción: 1:1 a la hormona) para valorar la producción pancreática residual de insulina si el paciente se inyecta insulina. En la Diabetes mellitus tipo I, la producción de la hormona es prácticamente nula, mientras que en la tipo II tiende a ser elevada para vencer la resistencia de los tejidos a su acción.



-Anticuerpos: la Diabetes mellitus tipo I se debe a la destrucción de origen autoinmune de las células B del páncreas y lleva a la deficiencia absoluta de insulina. En un elevado porcentaje de los pacientes, se detectan anticuerpos anti células B (ICAs), anticuerpos antiinsulina (IAA) y anticuerpos anti descarboxilasa de acido glutamico (GAD). Estos anticuerpos se pueden detectar en ocasiones antes de la aparición de la enfermedad, lo que les da un gran interés predictivo.

·Niveles de hemoglobina glicosilada (HbA1c) cada 3 a 6 meses: la hemoglobina glicosilada (o glucosilada) es una heteroproteína de la sangre que resulta de la unión de la Hb con carbohidratos libres unidos a cadenas carbonadas con funciones ácidas en el carbono 3 y 4. Prueba de laboratorio muy utilizada en la diabetes para saber si el control que realiza el paciente sobre la enfermedad ha sido bueno durante los últimos tres o cuatro meses (aunque hay médicos que consideran sólo los dos últimos meses). De hecho el 50% del resultado depende sólo de entre las cuatro y seis últimas semanas. Se puede determinar dicho control gracias a que la glucosa es "pegajosa" y se adhiere a algunos tipos de proteínas, siendo una de ellas la hemoglobina. Esto también ocurre en las personas sin diabetes. Existe la hemoglobina glicosilada (HbA1), y también la HbA1c que es más estable, es decir, no influyen en ésta los cambios bruscos en la glucemia.


Diabetes tipo II:

El diagnóstico de Diabetes Mellitus tipo II se establece por medio de la medición de glicemias plasmáticas, de acuerdo a alguno de los siguientes criterios estrictos:

Síntomas de diabetes (poliuria, polidipsia, baja de peso no explicada o un aumento de peso, según cada persona) asociada a glicemia tomada al azar > 200 mg/dl).

1.Glicemia plasmática en ayunas : la presencia de glucosa en concentración superior a 200 mg/dL (11,1 mmol/L) en plasma venoso en ayunas es compatible con el diagnostico de Diabetes mellitus si se ha presentado al menos en dos ocasiones sin otra causa que lo justifique. Los valores inferiores a 115 mg/dL (6,4 mmol/L) descartan el diagnostico. Conviene destacar que el nivel sanguíneo de glucosa es inferior en sangre venoso que en sangre arteriar y capilar (sangre obtenida por puncion de la yema de los dedos), de modo que el nivel de glucosa viene determinado por el punto de extracción de la sangre.

2.Glicemia plasmática 2 horas después de una carga de 75 g glucosa > 200 mg/dl. Se acompaña con 400 mL de agua y se ingiere en 5 o 10 minutos. Según los Grupos Expertos, se debe extraer una muestra basal y otra a las 2 horas. Normalmente la curva, si hay buena absorción, debe superar en algún punto los 200 mg/dL, y normalizarse a los 120 minutos, con valores inferiores a 140 ml/dL. Se considera estado de intolerancia a glucosa, situación que es reversible con el tratamiento adecuado, si en el punto de los 120 minutos, la concentración plasmática de glucosa esta entre 140 y 200 mg/dL. Por encima de este límite, el resultado es compatible con un estado de Diabetes mellitus.

Los valores de glicemia medidos con cintas reactivas en sangre capilar, o la medición de hemoglobina glicosilada A1c (HbA1c) no son aceptables para confirmación del diagnóstico de diabetes.

Diabetes gestacional:

Para detectar un posible riesgo de diabetes gestacional se puede utilizar varios métodos: glucemia basal postprandial, test de tolerancia oral a la glucosa, screening O'Sullivan, et
El test de tolerancia oral a la glucosa es una prueba médica cuyo objetivo es diagnosticar o excluir la diabetes.
El test de O´Sullivan se realiza durante el sexto o séptimo mes de embarazo y pretende descartar o detectar precozmente los estados de Diabetes durante la gestación que en un número muy significativo desembocara a lo largo de la vida en cuadros de Diabetes mellitus. Se extrae una muestra de sangre una hora después de ingerir 50 g de glucosa y en ella no debe superarse los 140 mg/dL. Si es para diagnostico, se administraran 200 g y se obtienen muestras basal, y tras 1, 2 y 3 horas. Los niveles máximos de la normalidad son de 105, 190, 165 y 145 mg/dL.





Cuidados de Enfermeria






El control de la diabetes

En la actualidad ambos tipos de diabetes pueden ser controladas con facilidad si el paciente sigue las recomendaciones de su endocrinólogo. Aún cuando hayan pasado meses antes del diagnóstico, se puede conseguir un buen control y por lo tanto una vida longeva y saludable. Las recomendaciones para un correcto control y tratamiento de la diabetes incluyen, dependiendo de la situación individual:

•vigilancia de la glucemia: gracias a aparatos de uso personal (glucómetros) que hacen lecturas casi instantáneas y fiables.

•seguimiento de la pauta medicamentosa prescrita por el endocrinólogo: que podrá ser desde la toma de una/varias pastillas al día hasta 1-2 inyecciones de insulina al día.

•seguimiento de una dieta apropiada: ésta será recomendada por su endocrinólogo, su médico de cabecera o su enfermera, y tendrá como principal objetivo ajustar y repartir la ingesta de energía necesaria para el individuo.

•tener en cuenta que determinadas actividades físicas y psíquicas podrán aumentar o disminuir los requerimientos energéticos. Por lo que podrá ser necesario variar la dieta y/o la toma de medicamentos/insulina.

•tener en cuenta que glucemias anormales pueden tener repercusiones a corto y/o largo en su salud (desorientación, desmayos, propensión a infecciones de orina e infecciones en general, mala cicatrización de heridas, mala circulación sanguínea…).

Así pues, consiguiendo niveles de glucemia cercanos a la normalidad será más posible que el paciente:
• Tenga más energía, se sienta menos cansado.
• Beba menos, orine menos frecuentemente y tenga menos infecciones de orina.
• Tenga una buena cicatrización de heridas y una piel saludable.
• Tenga menos problemas de vista.
• Tenga menos problemas de boca y de pies

Plan de Seguimiento

Parámetros de Seguimiento en el paciente diabético controlado

3 meses
1. Presión arterial y Frecuencia cardíaca
2. Peso e IMC
3. Cumplimiento en la dieta
4. Cumplimiento en el ejercicio
5. Cumplimiento farmacológico
6. Autocontroles en sangre y orina
7. Intervenciones educativas
8. Descartar hipoglucemias
9. Tabaquismo

6 meses
1. Presión arterial y Frecuencia cardíaca
2. Peso e IMC
3. Cumplimiento en la dieta
4. Cumplimiento en el ejercicio
5. Cumplimiento farmacológico
6. Autocontroles en sangre y orina
7. Intervenciones educativas
8. Descartar hipoglucemias
9. Analítica: Estudio inicial/anual (HbA1c y Perfil Lipídico)
10. Tabaquismo

9 meses
1. Presión arterial y Frecuencia cardíaca
2. Peso e IMC
3. Cumplimiento en la dieta
4. Cumplimiento en el ejercicio
5. Cumplimiento farmacológico
6. Autocontroles en sangre y orina
7. Intervenciones educativas
8. Descartar hipoglucemias
9. Tabaquismo

12 meses
1. Presión arterial y Frecuencia cardíaca
2. Peso e IMC
3. Exploración pies
4. Exploración ojos
5. Exploración macroangiopatía
6. Electrocardiograma
7. Analítica:
a. Estudio inicial/anual (HbA1c, creatinina y Perfil Lipídico)
b. Nefropatía diabética (microalbuminuria)
8. Tabaquismo
9. Cumplimiento en la dieta
10. Cumplimiento en el ejercicio
11. Cumplimiento farmacológico
12. Autocontroles en sangre y orina
13. Intervenciones educativas
14. Descartar hipoglucemias


Dieta del diabético:






La dieta del diabético es fundamental del tratamiento de la diabetes, todos los pacientes deben de cumplirla, consiguiéndose la compensación de más de un tercio de los diabéticos.

No todos los alimentos elevan el nivel de azúcar por igual, con la dieta se pretende conseguir el peso ideal, favorecer el desarrollo normal en el caso de los niños, y mantener los valores de azúcar lo más cercanos a la normalidad.

El equilibrio en una dieta de todos los componentes nutrientes es necesario para cualquier persona:
Los hidratos de carbono producen energía (un gramo proporciona 4 calorías). Se encuentra principalmente en alimentos tales como cereales, legumbres, patatas y diversas frutas.
Las grasas producen mucha energía, se reciben principalmente del aceite, margarinas, mantequillas, tocino, mantecas, etc...
Las proteínas, sirven principalmente para formar tejidos, músculos , etc ... Las de origen animal se reciben principalmente de la carne , el pescado , huevo , leche y pescado . Las de origen vegetal se encuentran principalmente en las legumbres.
Las vitaminas y minerales no tienen valor calórico y se reciben principalmente a través de hortalizas, verduras y frutas.

El plan de comidas: el número de ellos va a depender de muchos factores, como son la edad, el sexo, la actividad física y la existencia o no de sobrepeso. Generalmente suele ser una dieta de 1.500 Kcal. El reparto de los principios inmediatos debe de hacerse de la siguiente manera:
50 - 60 % en forma de hidratos de carbono.
25 - 30 % en forma de grasas.
15 % en forma de grasas.
Se deben de evitar los hidratos de carbono simples o azúcares simples. Las proteínas deben ser al menos el 50% de origen animal. Las grasas deben de provenir en su mitad de vegetales.

El número de comidas recomendado es seis: tres comidas principales (desayuno, comida y cena) y otras tres intermedias media mañana, merienda y antes de acostarse), para evitar las variaciones bruscas de azúcar.
Los alimentos ricos en fibra son recomendables ya que ayudan a disminuir, las oscilaciones de azúcar, por esto está recomendado los denominados productos integrales.

Los alimentos especiales para diabéticos no son generalmente recomendables.
Se debe de evitar tomar alimentos con azúcar como tartas, repostería, galletas y endulzar con sacarina.
No debe de tomar bebidas alcohólicas ya que aportan calorías y pueden desequilibrar la dieta.
No son recomendables bebidas refrescantes, por su alto contenido en azúcar.
Puede utilizar tablas de equivalencia para cambiar alimentos por otros.






•Menú estándar del diabético:

Desayuno:
1 vaso de leche desnatada, sola o con café, té (Sin azúcar o con sacarina)
1/2 pieza de pan integral con aceite de oliva, queso fresco o tomate.

Media mañana: 1 pieza de fruta.

Almuerzo:
Un plato de Carne o pescado o potaje de legumbres/cereales integrales/ pastas.
Ensalada o verdura o patatas (asadas o cocidas).
1/4 de pieza de pan.
Yogurt o queso desnatado o fruta.

Merienda:
1 pieza de fruta.
1 yogurth desnatado o un vaso de leche desnatada.

Cena:
Un plato de Carne o pescado o potaje de legumbres/cereales integrales/ pastas.
Acompañamineto: ensalada o verdura o patatas (asadas o cocidas).
1/4 de pieza de pan.

Diagnósticos de Enfermería
Desequilibrio nutricional por exceso
Aporte de nutrientes que excede las necesidades metabólicas.

Relacionado con (R/C):
Aporte excesivo de nutrientes en relación con el gasto.
Manifestado por (M/P)
Índice de masa corporal (IMC) > 25 en mujeres y 27 en hombres.



-El ejercicio Físico y la Diabetes :



El ejercicio físico es, junto con el régimen, la medicación y la educación diabetológica, uno de los pilares sobre el que se sustenta el tratamiento.

*Mejora el control glucémico: El ejercicio provoca un descenso de glucosa en sangre, al ser utilizada por el músculo como fuente de energía.

*Favorece la pérdida de peso: En el trabajo muscular también se consumen grasas, y ayudamos a combatir la obesidad.

*Disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares: Con la actividad física disminuye el colesterol y otras grasas y se previene las enfermedades cardiovasculares.

*Tiene efectos psicológicos positivos y aumenta la autoestima: Produce una sensación de bienestar psicofísica.

*El ejercicio es fundamental en el tratamiento de la diabetes.

Las personas con la diabetes controlada el ejercicio está indicado disminuye la glucemia y disminuye la necesidad de insulina e hipoglucemiantes orales.
En el caso de personas con la diabetes descompensada (+ de 300 mgr./dl y /o la presencia de acetona en la orina ) , está desaconsejado porque se incrementa la descompensación .

*Recomendaciones del ejercicio:
El ejercicio físico debe de ser regular (todos los días, a las mismas horas , con la misma intensidad y duración):
Se evitará la coincidencia de la máxima acción de la medicación. Un buen momento es después de las comidas.
Debe de hacerse de acorde con la edad, condición física y estado de salud de la persona.
Después de los 40 antes de realizar ejercicio físico es recomendable realizarse un examen general y del sistema cardiocirculatorio.

*Situaciones desaconsejadas:
- Lesiones de los grandes y pequeños vasos.
- Lesiones de los nervios.
- Lesiones renales o de la retina avanzadas.
- Diabetes descompensada (+ 300 mgr./dl )
- La propia naturaleza del deporte o del ejercicio , como :
- Alpinismo (por el peligro de hipoglucemia y pérdida de conciencia) .
- Pesca submarina (por el peligro de hipoglucemia y pérdida de conciencia).
- Los que implican un riesgo de traumatismo (boxeo).
- Los que conllevan alta competividad (excesiva tensión emocional).

Diagnósticos de Enfermería

Deterioro de la movilidad física
Limitación del movimiento independiente, intencionado, del cuerpo de una o más extremidades.

Relacionado con (R/C)
Malestar o dolor
Deterioro de la fuerza o masa muscular
Sedentarismo, desuso o mala forma física
Pérdida de la integridad de las estructuras óseas
Manifestado por (M/P):
Cambios en la marcha
Enlentecimiento del movimiento



El cuidado de los pies:

Los pacientes diabéticos tienen mayores probabilidades de tener problemas con sus pies que el resto de las personas.
Cuando se padece diabetes, el cuidado de los pies es imprescindible. Ya que la circulación en los pies está disminuida, los nervios se vuelven menso sensibles y existe una mayor propensión a las infecciones.
Los problemas empiezan por cualquier pequeño traumatismo (rozadura, herida, grieta,etc.) .Estas heridas se pueden infectar. Los tejidos infectados se inflaman, requiriendo mayor aporte de sangre, al no estar siempre disponible, como consecuencia de una circulación inadecuada, y se favorece la extensión de la infección.

Cuidados de los pies:

-Mantener los pies limpios diariamente con agua tibia y jabón. Sécalos bien sin frotar, especialmente entre los dedos, teniendo en cuenta no dejarlos húmedos. Si tu piel está seca y escamosa utilizar vaselina.
- Obsérvate los pies a diario, si observas una anormalidad debes de consultarlo con el médico o con la enfermera.
- Mantener las uñas limpias y cortas, recortándolas en sentido horizontal sin apurar en las esquinas, usa mejor lima que tijeras.
- Lleva bien abrigados los pies, usando calcetines de lana fina o algodón, que cambiarás a diario.
- Utiliza un calzado flexible, cómodo y bien ajustado. Procura que la puntera sea ancha para evitar roces. Si utiliza un calzado nuevo, su uso debe de ser gradual para evitar rozaduras.
- No caminar descalzo o con sandalias.
- Utilizar callicidas para eliminar callos y durezas, no usar tijeras o instrumentos afiliados.
- Acercar los pies a estufas y braseros o aplicar bolsas de agua caliente.
- No utilizar medias, calcetines que compriman demasiado

Diagnósticos de Enfermería
Riesgo de deterioro de la integridad cutánea
Riesgo de que epidermis, dermis o ambas se vean negativamente afectadas.


Relacionado con (R/C):
Factores mecánicos
Hipertermia
Sustancias químicas
Medicamentos
Prominencias óseas
Alteración de la sensibilidad
Alteración de la circulación


Tratamiento Farnacológico: Antidiabéticos Orales

*Factores que contribuyen a la hiperglucemia son:

-Aumento de la resistencia de los tejidos periféricos a la insulina.
-Aumento de la resistencia hepática con la liberación hepática de glucosa.
-Disminución de la secreción pancreática de insulina.
-Aumento de glucagon por las células alfa pancreáticas.
-Absorción de HC con los alimentos.


*Fármacos:
Estimulan la secreción de insulina: sulfonilureas, meglitinidas.
Disminuyen la resistencia insulínica:
-En tejidos periféricos:tiazolindindionas.
-En hígado: metformina y glitazonas.

Enlentecen la absorción de HC:
-Inhibidores de alfa-glucosidasas intestinales (acarbosa y miglitol).

Disminuyen la secreción de glucagon y aumentan la de insulina:
-Gliptinas: sitagliptina, vidagliptina.


Recomendaciones tto con ADO:

•Comenzar si no es efectivo el tto higiénico-dietético. La elección del fármaco dependerá del paciente, número de ingestas, interacciones, etc.

•La metformina se considera fármaco de primera elección en la diabetes tipo II.

•La metformina asociada a glitazonas o sulfonilureas está indicada en pacientes obesos o con sobrepeso.

•Cuidado con las interacciones.


Tratamiento Farmacológico: Insulinas


Las clasificaremos en función de la secreción pancreática, en insulinas prandiales, insulinas basales.

*Prandiales:

Tienen como función controlar las oscilaciones de la glucosa relacionadas con la ingesta. La secreción pandrial de insulina estimula la utilización y almacenamiento de la glucosa e inhibe la producción de glucosa hepática.
La ventaja de estas insulinas es que pueden administrarse antes o incluso después de la ingesta permitiendo así una mayor flexibilidad de horarios y ajustar mejor la dosis en función de la cantidad de carbohidratos de la dieta.

*Basales:

Tienen como función imitar la secreción basal de insulina por el páncreas y mejorar su captación por parte del cerebro y otros tejidos consumidores de glucosa.

-Insulina NPH: Se obtiene al añadir a la insulina regular protamina retardante que afecta tanto a su comienzo de acción como a la duración.

-Insulina NPL: Similar a la NPH pero se obtiene añadiendo protamina a la insulina lispro.

-Insulina Glargina: Análogo de la insulina de acción prolongada que se caracteriza por carecer de pico máximo y una duración de 24 horas.

-Insulina Detemir: Análogo de la insulina basal que también carece de pico máximo pero su duración está condicionada por la dosis, de forma que a dosis elevadas su duración se aproxima a 24horas (aunque en estudios realizados en muchas ocasiones se precisan dos dosis para cumplir los objetivos).


*Mezclas:

Combinaciones de insulinas basales y pandriales en proporción fija en la que el numerador expresa el porcentaje de insulina pandrial.

Inconvenientes de estas mezclas: es la presencia de dos picos de acción, hecho que condiciona la ingesta a unas horas determinadas.
“La utilización de análogos de la insulina debe realizarse con prudencia en el embarazo”.
“El cálculo de la dosis de insulina se hace en función de peso 0.5kg”.

Complicaciones crónicas




Las complicaciones crónicas de la diabetes constituyen la principal causa de ceguera, de insuficiencia renal terminal y de amputaciones no traumáticas de miembros inferiores en los países industrializados. Estas alteraciones solo aparecen (o lo hacen de manera leve) cuando el individuo no se controla la tensión arterial y la glucemia (fundamentalmente), aunque también tienen importancia otros factores como el colesterol, tabaco, etc.,

- Complicaciones en los ojos: Retinopatía diabética.
Afectación de la retina, es decir, de la capa ocular compuesta de vasos sanguíneos que cuando está sometida a glucemias y tensiones arteriales elevadas durante mucho tiempo, se intenta defender creando sustancias que terminan por obstruir los vasos sanguíneos oculares o éstos se acaban rompiendo, produciendo las temidas hemorragias. Si la tensión del ojo es elevada, también contribuirá a que aparezcan las lesiones.
La retina no tiene nada que ver con el enfoque ocular, de tal manera que la existencia de retinopatía en una persona con diabetes pasa desapercibida durante los primeros años (el paciente no nota nada), hasta que ya aparecen los puntos hemorrágicos o isquémicos de obstrucción, que producen directamente pérdidas de visión parciales o totales. La retinopatía diabética tiene tratamiento. Consiste en la fotocoagulación con
láser o en la inyección en la retina de una sustancia que evita el sangrado. Cuanto
más pronto se trate, mayor será el éxito.
Este tratamiento no va a hacer recuperar las pérdidas de visión, pero si va a evitar que las obstrucciones o hemorragias aumenten. Se trata de “quemar” las fugas de las pequeñas tuberías arteriales. Es muy importante que la persona con diabetes se haga al menos una retinografía al año.


- Complicaciones en el riñón: Nefropatía diabética.
La diabetes mal controlada puede producir alteraciones en los pequeños vasos
sanguíneos del riñón. Como consecuencia, el riñón se daña, y es cuando se produce
la nefropatía diabética.
La capa glomerular del riñón filtra las sustancias nocivas corporales y las trasforma en orina. Esta capa está compuesta por pequeños vasos sanguíneos lo mismo que ocurría con la retina de los ojos. Ante agresiones constantes como la existencia de continuadas glucemias elevadas, y/o tensiones sanguíneas altas, y/o la alimentación excesiva de la dieta… se afecta y comienza a filtrar mal la orina. Pero si no cortamos la progresión de estas lesiones, llegará un momento, en el que las sustancias nocivas ya no se eliminen y sean tóxicas para el organismo, llegando a necesitar diálisis para depurarlas y/o un trasplante renal.
En la nefropatía diabética la persona afectada puede estar muchos años sin notar
nada. Las molestias aparecen tras años, cuando el riñón ya está muy dañado.
Es muy importante realizarse una vez al año una prueba para determinar la cantidad de albumina que eliminamos por la orina.
Esta prueba se denomina Microalbuminuria y se realiza en orina.




-Complicaciones en el pie: Pie diabético.
Los pies son uno de los lugares que más problemas pueden ocasionar le a la persona con diabetes. Muchas veces, se pierde sensibilidad y la persona no percibe roces, cotes, pinchazos, etc. Esto ocurre cuando existe una neuropatía diabética, es decir, la afectación de los pequeños vasos sanguíneos que tienen los nervios de las extremidades. Si además, la persona con diabetes tiene un defecto en la circulación distal (grandes vasos de las piernas), la falta de oxigeno predispone a la aparición de infecciones que se desarrollan rápidamente, y que pueden dar lugar a la temida gangrena, y ésta ser el motivo de una amputación. En definitiva, es un daño que se produce en los nervios por el mal control de la diabetes, ocasiona una
pérdida de la sensibilidad y por lo tanto, disminuyen o no existen las sensaciones
normales de dolor. Así, en caso de producirse una lesión, no nos damos cuenta de que
tenemos una herida, una ampolla o una irritación en el pie.
Además, las personas con diabetes tienen tendencia a que se deformen sus dedos
produciéndose puntos de presión anormales que ocasionan ampollas, irritaciones. A
todo ello se suma que, debido a la mala circulación de la sangre, las lesiones tardan
en curarse y se infectan.


- Complicaciones macro vasculares:
1. Cardiopatía isquémica: infartos o anginas de pecho.
2. Trombosis o infartos cerebrales.
3. Disminución de la circulación de los miembros inferiores.

Las alteraciones de la circulación de los grandes vasos pueden provocar daños en el corazón, cerebro y en las piernas. La diabetes puede ocasionar complicaciones en las grandes arterias de nuestro organismo, acelerando el proceso que se denomina Arterioesclerosis o produciendo trombos que se pueden desprender obstruyendo algunas arterias y ocasionando mayor riesgo de infarto.

Complicacines agudas

1.Cetoacidosis diabética: es una complicación más propia de la Diabetes mellitus tipo I. la carencia de insulina o su baja acción permite la elevación de glucosa plasmática, que extrae agua y deshidrata algunos tejidos, a la vez que aparecen en orina, por superarse el umbral de recuperación renal. La glucosuria arrastra agua, es decir, inicia un proceso de diuresis osmótica, por el que se pierde agua y electrolitos, como el sodio.
La deshidratación causada en el sujeto, así como la alta concentración de solutos en plasma (alta osmolairdad) pueden introducir al paciente en un estado comatoso por shock hipovolémico, con acidosis láctica más o menos pronunciada.


2.Descompensación hiperglucémica. Se da más en los diabéticos tipo II de edad avanzada, en los que la deshidratación se puede ir desarrollando lentamente y su efecto achacarse a otras causas. Analíticamente, son claves la osmolalidad y la glucosa sanguínea. El cuadro metabólico es similar al de la cetoacidosis, pero circunscrito solo al aspecto hidrocarbonado.


3.Acidosis láctica. En diabetes mellitus con la que coexisten problemas circulatorios, insuficiencia cardiaca o respiratoria o anemia. Se determina con el equilibrio acido-base, acido láctico y glucosa.


4.COMA HIPOGLUCÉMICO. A continuación desarrollamos en qué consiste la hipoglucemia y el coma hipoglicémico con más detalle:

La Hipoglucemia es una concentración de glucosa en la sangre anormalmente baja, inferior a 50-60 mg/100 ml, se suele denominar coma hipoglucémico cuando se produce una pérdida de conocimiento por una disminución del aporte de oxígeno al cerebro.

Causas de la hipoglucemia:

•Desequilibrio de insulina:
Error en los tipos o dosis de insulina o ADO
Por masajes o aplicación de calor en la zona de inyección.
Inyección intramuscular.
Olvido, retraso o disminución de alguna toma de alimento.
Ejercicio no planificado o prolongado.
Comienzo de la menstruación, posparto, lactancia materna.
Adelgazamiento.


•Fracaso contrarregulador:
Hipoglucemias de repetición frecuentes
Años de evolución de la diabetes
Alcohol, drogas


•Disminución de la metabolización de la insulina:
Desaparición de los anticuerpos antiinsulina
Insuficiencia renal o hepática
Hipotiroidismo


En términos generales, la hipoglucemia resulta de 2 factores:

-Un exceso de insulina activa en el cuerpo
-Una respuesta fisiológica correctiva que es imperfecta.

Normalmente, el glucagón y la adrenalina son dos hormonas responsables de mantener la glucemia dentro del rango de 70-100 mg/dL. El cuerpo, al producir el glucagón y la adrenalina, logra corregir cualquier exceso de insulina (que haga bajar demasiado los niveles glicéricos) y logra avisarnos que no hay suficiente glucosa circulando para permitir la función normal del cuerpo. Pero el proceso de corrección es imperfecto o ausente en la mayoría de las personas con DM. Por este defecto, el azúcar en sangre baja a niveles hipoglucémicos cuando la insulina esté activa y presente en una cantidad excesiva para la cantidad de carbohidrato presente en la sangre. Si la dosis de insulina (o medicamento oral) es demasiado grande para la alimentación ingerida, puede haber un episodio de hipoglucemia. Si la cantidad de actividad física es mayor a la prevista, la cantidad de insulina o medicamento oral presente en el cuerpo puede resultar excesiva y un episodio de hipoglucemia puede iniciarse. Si una persona con DM1 ó DM2 toma la insulina o el medicamento oral y luego decide no comer en las siguientes horas, puede presentarse un episodio de hipoglucemia. La manera más confiable de saber si un episodio de hipoglucemia está inminente es utilizar el medidor casero de glucosas.

Hipoglucemias Leves-moderadas

Son aquellas que el diabético soluciona por sí mismo, sin ayuda de otras personas.
Los síntomas que pueden notar inicialmente:
•Sudor frio.
•Temblores.
•Nerviosismo.
•Hambre.
•Debilidad.
•Palpitaciones.
•Hormigueos.



Es muy importante que cada diabético aprenda a reconocer sus propias reacciones ante las hipoglucemias.

¿Qué hacer?

Primero: si es posible, determinar la glucemia capilar con refractómetro. Pero siempre, en caso de duda, pensar y actuar como si fuese hipoglucemia.
Segundo: detener la actividad que está realizando.
Tercero: comer inmediatamente.

Inicialmente:
•1vaso de refresco azucarado, o
•2 terrones de azúcar, o
•1 zumo de frutas con o sin azúcar, o
•1 vaso de leche, o
•3 galletas tipo “María”.
Si tras 5 o 10 minutos la situación no mejora, debería repetirse la toma anterior.


Hipoglucemias Graves
Es aquella en la que el diabético precisa ayuda de otra persona (familiares, compañeros de trabajo, amigos, personal sanitario, etc.).
Puede ser debida a que el diabético no ha reconocido la hipoglucemia inicialmente, o no ha actuado de forma inmediata para corregirla.
En estas situaciones el diabético no sabe bien lo que dice o hace.
Esta fase puede confundirse con borrachera.

•Dolor de cabeza.
•Alteración de la palabra (hablar lento, entrecortado, dificultoso, etc.)
•Cambio de comportamiento (agresividad).
•Trastornos visuales (visión borrosa, doble…)
•Convulsiones.
•Pérdida de consciencia (coma).

Actué Rápidamente.
Primero: avise a un servicio de urgencia, advirtiendo que se trata de una persona diabética.
Segundo: inyectar Glucagón, repitiendo la operación si a los diez minutos permanece inconsciente.
Tercero: una vez recuperado administrar por boca líquidos azucarados.
En hipoglucemias graves hay que intentar, cuando el diabético está desorientado pero sin perder el conocimiento, darle un líquido azucarado, tipo cola, zumo con azúcar, ya que si no lo rechazaría.
Si esta inconsciente y no puede tragar, no hay que darle ningún alimento por vía oral


Los servicios de urgencias realizarán las siguientes acciones:
-Medir el nivel de glucemia.

-Administrar 25-50 ml de dextrosa al 50% vía intravenosa.

-Considerar la infusión continua de dextrosa al 5% en agua o al 10% para mantener la glucemia dentro del rango normal, o administrar 1 mg de glucagón intramuscular (0,5 mg en niños con edades comprendidas entre 3 y 5 años; 0,25 mg en niños menores de 3).
-Si no hay mejoría en 20 minutos, repetir la misma dosis de glucagón.

-Una vez que el paciente pueda tragar, administrar 20 gr de hidratos de carbono por vía oral para restablecer los almacenes de glucógeno depleccionados y para impedir la recurrencia de hipoglucemia.

-Es frecuente que se produzca el vómito después de la administración de glucagón; se debe colocar al paciente de manera que se impida la aspiración del vómito.

-El glucagón puede ser ineficaz si los almacenes de glucógeno hepáticos se han depleccionado.

-Vigilar la glucemia, las constantes vitales y el estado neurológico frecuentemente.

-Después de tratar con éxito la hipoglucemia, es útil para los pacientes meditar sobre las posibles causas para impedir futuros episodios. Recordar las dosis recientes de insulina, la hora de las inyecciones, la ingesta realizada, las actividades y circunstancias especiales puede ayudar a identificar las causas de la hipoglucemia. Los episodios de hipoglucemia frecuentes o prolongados contribuyen al daño neurológico permanente. El reconocimiento temprano de los síntomas y el tratamiento inmediato son esenciales.

Prevención de hipoglucemia• No retrasar u olvidar tomas de alimentos sin haber hecho los ajustes necesarios con las dosis de insulina.

•Actuar rápidamente ante los primeros síntomas.

•La persona diabética tratada con insulina ha de llevar siempre consigo una fuente mínima de 15 g de hidratos de carbono de absorción rápida y ha de tener en casa dos envases de GLUCAGON actualizados.

•Llevar identificación de “Soy diabético” cuando salga a la calle.

•Aumentar las medidas de prevención cuando se lleve a cabo mayor ejercicio físico del habitual, durante la menstruación y en las horas posteriores a cualquier episodio de hipoglucemia. Si ésta fue grave se debe extremar la precaución hasta pasados 6-7 días.

•En personas con hipoglucemias nocturnas, lo que se ha de hacer es tomar una comida ligera antes de acostarse con alimentos que aporten hidratos de carbono complejos y proteínas (Leche, galletas).

•Si la glucemia antes de dormir es inferior a 110 mg/dl. Realizar determinación a las 3 de la mañana.

•En las personas con hipoglucemias desapercibidas, las cifras de glucemia deben estar ligeramente elevadas (superiores a 120 mg/dl) durante varias semanas para disminuir el riesgo de padecer episodios de hipoglucemias, pactar un mayor número de determinaciones de glucemia capilar.

Las complicaciones más frecuentes que puede ocasionar una hipoglucemia son:

• Accidente vascular cardiaco y cerebrales con cuadros de ángor, infarto agudo de miocardio, hemiplejia.

• Efecto Somogy: es el efecto de rebote producido por la administración de una dosis de insulina demasiado alta.
El organismo, para intentar contrarrestar la hipoglucemia provocada por la alta dosis de insulina, secreta hormonas contrarreguladoras (epinefrina, ACTH, glucagón y somatotropina), con lo que se estimula la lipólisis, gluconeogénesis y glucogenolisis y aumentan los niveles séricos de glucosa.
Suele suceder en los pacientes diabéticos que reciben una dosis nocturna de insulina, por lo regular insulina NPH, de tal modo que en las horas de máxima acción de ésta se produce una hipoglucemia que desencadena este efecto —una hiperglucemia y cetosis matutinas—, lo cual a su vez puede malinterpretarse como resultado de una dosis insuficiente de insulina nocturna.

• Encefalopatía hipoglucémica con daño permanente de la función cerebral por episodios repetidos de hipoglucemia.

Alta de Enfermería: Condiciones


Antes del alta, el paciente y sus familiares deben tener una serie de conocimientos claros:

•Definir la diabetes como una enfermedad crónica que requiere tratamiento durante toda la vida teniendo en cuenta la alimentación, el ejercicio físico y a menudo la medicación.


•Manejo de la Dieta:
Limitar la cantidad de azúcares simples.
Disminuir grasas y sal.
Aumentar fibra.
Horario y reparto de comidas.
Peso adecuado.

•Importancia del Ejercicio físico:
Adecuarlo de forma individualizada.
Reconocimiento sobre el beneficio.
Regularidad.
Recomendaciones sobre el vestido y calzado a utilizar.


•Autocontrol analítico:
Valoración y conocimiento de cifras glucémicas (Optimas, hipoglucemias, hiperglucemias,….)
Pautas horarias (normal, alarma,…)
Manejo de glucómetros.
Técnicas de autoinyección.

•Manejo del régimen terapéutico:
Adherencia al tratamiento.
Detección de efectos secundarios.
Complicaciones agudas y crónicas.
Higiene y cuidados en pie diabético.


Una vez que el paciente se ha dado de alta en el hospital el circuito a seguir es el siguiente:

•Derivación a consulta médica:
Adhesión al tratamiento
Pruebas complementarias según protocolos
Alteraciones significativas de cifras glucémicas
Aparición de síntomas de alarma y/o complicaciones


•Derivación al trabajador social:
Problemas personales, sociofamiliares, económicos, etc.
Participación en asociaciones